La
recuperación del aceite de cocina usado es un pequeño
gesto por nuestro medio ambiente que todos podemos realizar contribuyendo
a la mejora de la calidad del agua de nuestros ríos y a obtener
una fuente de energía renovable y menos contaminante, como el
biodiesel.
El aceite vegetal es un producto habitual en nuestras cocinas al que
damos variados usos además del culinario.
Los aceites domésticos son grasas liquidas (ácidos grasos)
de color verde oro, y viscosidad variable según su procedencia.
Son sustancias de menor densidad que el agua, por lo que siempre flotan
en su superficie, formando una capa que disminuye el paso de la luz
e impide el intercambio de oxígeno entre el agua y el aire. Es
decir, dificulta la supervivencia de la vida acuática “algas
y peces”, causando además la desaparición de microorganismos
necesarios para la autodepuración del agua. Sin ser un producto
tóxico,
causa un empobrecimiento de
los ecosistemas acuáticos.
El aceite doméstico con el uso se carga de componentes polares
que son cancerígenos. La legislación marca que esos componentes
polares no deben superar el 15%, por lo que debemos cambiarlo con frecuencia.
Cuando esta ya usado: Si lo arrojamos por el desagüe provoca malos
olores por descomposición, suciedad y atascos en tuberías,
alimento de ratas, cucarachas y otros insectos, mayores gastos de las
depuradoras, por atasco de filtros, etc, contaminación del agua
de nuestros ríos. Si lo acumulamos en un bote y lo tiramos a
la basura, disminuimos la contaminación pero no lo reutilizamos
y podemos perjudicar a los sistemas de recogida. Lo más acertado
es reciclarlo, darle una nueva
vida, fabricar jabón o llevarlo a un punto de recogida. Para
ello, primero debes filtrarlo con coladores de malla metálica
fina, guardarlo en un bote, y dirigirte al contenedor de tu municipio,
con este aceite se puede fabricar un combustible.
COMO
ELABORAR EL JABÓN LÍQUIDO CASERO.
Ingredientes: 1 litro de aceite usado (o 850 gr. De sebo y grasa), 5
litros de agua, 250 gr de sosa sólida en lentejas (concentración
al 90 %), 150 gr. de carbonato sódico o bicarbonato sódico,
el zumo de 2 limones. Esencias o perfumes de pino, limón, romero,
lavanda u otros.
Preparación: En un recipiente de plástico de tamaño
suficiente y seco colocar la sosa, sobre ella añadir el agua
y remover hasta que quede disuelta. Añadir el carbonato y remover
hasta su total disolución. Colar bien el aceite y verterlo despacio
al agua sin dejar de remover.
La reacción de formación del jabón es lenta, tarda
entre 5 y 15 días agilizándose si removemos de vez en
cuando, a partir del tercer día podemos usar la batidora o varilla
eléctrica. Una vez terminado el proceso para darle aspecto cremoso
y homogéneo conviene calentarlo todo un poco con otros 5 litros
de agua, es el momento de añadir el limón y cuando esta
casi frío las esencias, remover y envasar inmediatamente.
Jabón
de tajo:
Ingredientes: los mismos que el anterior cambiando 1litro de agua por
cada litro de aceite usado.